Last year letter (III)

En este año distinto te envío dos cartas. Una la escribí al comenzar diciembre (siempre ansiosa) y estúpidamente me adelanté como si el año hubiese terminado. Decidí sentarme a escribir el mismo 31 de diciembre y este es el resultado de ambas cartas. Por favor es importante para mi que leas ambas:

Buenos Aires, 31 de diciembre de 2020

    Querido amigo mío, 

                                    Diciembre fue el último golpe que recibí, o podría decir el último obstáculo con el que me enfrenté. Fue un desafío para demostrar que todo lo aprendido en estos meses no eran sólo palabras. No me enojé y logré aceptar lo que me tocaba transitar. Respiré profundo tomé su mano y lo acompañé a que su corazón sanará. Tuve miedo, fueron momentos de incertidumbre y dolor pero logré abrirme y refugiarme en aquellos que nunca dudaron darme su contención. 

Un día para el otro, y todavía no sé como sucedió (quizás el universo me escuchó) me encontré encerrada en cuatro paredes intentando convertirlas en un hogar. Rodeada de mensajes de amor, logré desarmarme y  lloré, pero esta vez, de emoción por recibir tanta calidez. Intenté transmitir un poco de esa tibiez al ambiente para sentirme abrazada. Finalmente me sorprendí a mi mi misma y me sentí orgullosa de lo alcanzado. En esta víspera de año nuevo me topé con esta frase: "Cuando todo parece un caos, respira y confía. Es la vida acomodando todo en su lugar". Ojalá el universo vuelva a cruzar nuestros caminos y nos reúna en un profundo abrazo, solo nos resta confiar en este nuevo año que comienza y que traerá mejores recuerdos.

Hoy brindemos por un nuevo comienzo y dejemos que el mañana llegué sin expectativas aceptando los desafíos, sembrando amor y regalando sonrisas. No dejemos de aprender y de sorprendernos con lo simple. Mucha felicidad y amor para tu 2021!

Sincerely yours,


Buenos Aires, 5 de diciembre de 2020

                           Querido amigo, 

                                                Qué decirte de este año tan peculiar!? Creo no ha pasado desapercibido para nadie. En lo personal seguí creciendo día a día. Un virus minúsculo vino a recordarnos lo maravilloso y fundamental que es respirar. Hemos hablado de la muerte como parte de la vida y siempre te remarqué no temerle, pero, tenerla tan presente me ha quitado el sueño algunas noches. Me he enfrentado a mis miedos y trate de ahuyentarlos. 

A principio de año en un viaje junto al lago aprendí a perdonar. Sabes que siempre fui muy culposa,  y entenderás lo que me ha costado  Finalmente me perdoné y perdoné a quienes me hirieron. Me liberé. Invertí el vaso, ahora me parece que esta casi lleno. No te ilusiones sigo siendo la misma, así que, a  veces, me ahogo en ese mismo vaso-

Crecí y seguí avanzando de un peldaño a la vez. Volví a conectarme conmigo misma, reforzar los cimientos, repasar los valores, y busqué afianzar lazos. Me di cuenta de la importancia de agradecer cada día vivido.  Las palabras de Bapu siempre me han guiado, pero esta frase me ha marcado mucho en estos tiempos y necesito regalártela:  "Vive como si fueras a morir mañana. Aprende como si fueras a vivir siempre"

Me voy despidiendo y creo que estas cartas las escribo más para mi que para ti, pero me gusta creer que es una nueva tradición que creamos.  No puedo hacerme la valiente contigo, sabes lo que me aterran los comienzos, las hojas en blanco, los nuevos años. No me gustan los balances anuales,  aunque estas cartas se asemejan bastante. Discúlpame si te he aburrido, pero ha sido un año largo.

Feliz 2021 my friend!

Sincerely yours,


Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi dulce tormenta

Last year (part II)